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21 de junio - Lxs invisibles se reúnen en París

Continúa la lucha contra el anti-terrorismo

Domingo 21 de junio de 2009, por encoma

Comunicado

Hoy 21 de junio, al día siguiente de la publicación oficial del decreto anti-pasamontañas, varios cientos de invisibles se juntaron en la Fuente de los Inocentes, en París. Un cortejo rico en las más variadas máscaras, marchando al ritmo sostenido de las percusiones artesanales, se sacudió en dirección de la Bastilla. En su camino encontró la sede de la Administración penitenciaria.

Respondiendo a la provocación que constituyen la inmensa banderola "Tour de Francia ciclista de la Penitenciaría" y la existencia misma de ese edificio, bloqueados por los granaderos en ese momento temprano del recorrido, vigilados por un helicóptero, los manifestantes encontraron adecuado marcar la fachada de algunas señas explícitas de su paso: vitrinas rottas, tiros de mortero, bombas de humo, etc.

De acuerdo con la estrategia evidente de la policía, los manifestantes fueron cargados, gaseados, obligados a retroceder. Tras algunas contra cargas, estando rodeado todo el barrio, los manifestantes se dispersaron en la multitud. Al menos seis personas fueron interpeladas, unas de modo politicamente dirigido, otras de modo oportuno. Al recoger una bomba de humo, se escuchó fanfarronear a un oficial: "Ya estuvo, tenemos con qué hacer algo pesado. Tenemos bombas de humo, una agresión, restos de los destrozos. No está nada mal!

Tenemos curiosidad por las consecuencias policiaco-judiciales que darán a los hechos de ese día. Estamos más determinados que nunca. El baile continúa. Las máscaras vencerán.

Firman:

Los comités de apoyo a los inculpados del anti-terrorismo, y de otras partes


Decreto anti-pasamontañas ¿qué rayos es éso?

El decreto anti-pasamontañas es una prohibición de cubrirse voluntariamente el rostro durante una manifestación pública. Fue publicado el sábado 20 de junio de 2009 en el Diario oficial. El texto castiga con una multa máxima de 1500 euros (alrededor de 27 mil pesos mexicanos) "el hecho de que una persona, dentro o en las orillas inmediatas de una manifestación en la vía pública, disimule voluntariamente su rostro, con el fin de no ser identificado en circunstancias que hagan temer alteraciones del orden público".

Si el gobierno sarkoziano no hubiera inventado este decreto seguro Orwell revive para agregarlo a las medidas del Big Brother. Además prevee una multa de 3000 euros en caso de reincidencia. Y como humor involuntario, señala excepciones en caso de "manifestaciones conformes a las costumbres locales o cuando el tapar el rostro está justificado por un motivo legítimo".

¿Ser feo será considerado como "motivo legítimo"? ¿o el ser extremadamente hermoso? Habrá que hacer la prueba para saberlo...

De los comités de apoyo a los inculpados de Tarnac… a los que luchan…

Se lucha hoy, como ayer, como antier, como siempre; hombres y mujeres luchan, por sus derechos, por conservar su empleo, por trabajar menos o menos duramente, por salarios menos raquíticos; en todas partes se pelea por la libertad, por su hospital o contra la prisión, por tres pesos, por medicinas, por el honor, por las subvenciones; luchan por sus amigos, su hermana, su padre, su hermano o su madre, para salvar la investigación, por la idea que uno se hace de la educación o de la siquiatría; por más ventajas, por menos preocupaciones, se lucha por la sobrevivencia, se lucha porque no se desea tronar o porque se truena de rabia, o bien a causa del desprecio de los gobernantes y de los patrones, de los jueces y los controladores sociales, de los despachos de estudios, de los expertos, de los pendejos patentados y de aquellos que nos explican que es necesario seguir esperando, aguantar un poquito más, so pena de pagar con el pellejo – porque el desprecio que nos confronta es tan evidente y tan insolente; se lucha igual sin saber bien por qué, sino porque te cae encima; en todas partes, siempre, se lucha. Las razones no están a discusión, la fuerza que las habita se encarga de darles razón.

Pero a ciencia cierta, peleamos hoy con más seriedad que ayer, con más seriedad que hace 10 años, peleamos con más seriedad que no lo habíamos hecho en mucho tiempo. No estamos ya dispuestos a que nos corran, a ser masacrados o hambreados sin que haya consecuencias. Cuando una deslocalización como tantas otras, entraña la destrucción de una prefectura (Continental), cuando los empleados de ErDF y GrDF recuerdan en los hechos que estar empleado en los sectores de la energía es también estar en posibilidad de apagar la máquina, cuando se saca el cañón para defender su hospital (Carhaix), he ahí lo que es serio, lo que tiene el mérito de recordar que la historia es una potencia que los hombres pueden reapropiarse a cada instante, en detrimento de aquellos que son, temporalmente, los vencedores.

A esa seriedad del pueblo, y como un espejo, responde el desprecio de los gobernantes y los gestores, su desprecio sin límites, y esta es su forma propia de lo serio, es la seriedad de los gobernantes. A esa seriedad del pueblo, a esa seriedad que está repleta de historia, que está llena de la historia del pueblo, a esa seriedad que es el regreso de la historia, los gobernantes oponen sus aires de bufones gesticulantes, sus aires de cabezas-huecas en Saint-Tropez, la nueva pequeña Marie-Antoniette presenta su perrito a la prensa, se organizan como si nada cumbres sobre la inmigración, en Vichy por supuesto. Pero eso no es todo. La vacilante seriedad de nuestros pequeños amos precisa de una quilla, como la de los barcos, para no bambolearse demasiado, a la primera ola. Y esta quilla es el miedo.

Al hecho tan simple, al hecho tan elemental, y de siempre, de que hombres y mujeres luchan, se le inventan nombres de cuento de espantos. Es así que se producen en la escena mediática los “vándalos” (casseurs), las “bandas” y los “terroristas”, los “jóvenes de los multifamiliares” o los “clandestinos”, como antiguamente se presentaban las brujas al público, antes de quemarlas. Mediante un uso astuto e indecente de las nomenclaturas, el noticiero de la noche y los discursos de los ministros rebautizaron, para volverlas ajenas y odiosas, las técnicas de lucha que desde siempre han pertenecido al pueblo, y especialmente, al movimiento obrero: se ha hecho común llamar una simple huelga, “toma de rehenes”, recientemente se ha tratado incluso de calificar un sabotaje sin riesgo de “atentado terrorista”. Contra las brujas, es bien sabido, todo se vale. La prisión por supuesto, con o sin proceso, los controles judiciales exorbitantes, que fijan los sitios de residencia y los trayectos autorizados, que prohíben al amigo ver al amigo, al hermano ver a la hermana; y cuando el “enemigo interior” está suficientemente señalado, por su mala cuna por ejemplo, las vejaciones infinitas, los ataques de la policía, y dado el caso, la masacre.

Todo ello, las denuncias públicas, las fábricas de espantapájaros, las disposiciones penales y militares, apuntan ante todo a deshacer los vínculos, los vínculos no neutros que hay entre los seres, los vínculos políticos. Los vínculos no cesan cuando se les ordena, no saben de Grenelle, la amistad es la carne de lo político – o bien, lo político es una locura. Evidentemente, tenemos necesidad de mucho más que de una manifestación, necesitamos vínculos más duraderos y más festivos, a la medida de lo serio de la situación. Pero esta manifestación puede ser un primer encuentro, esa es nuestra invitación. Siéntanse como en su casa.

Manifestación 21 de junio de 2009 a las 3 de la tarde

Ver en línea : Soutien aux inculpés du 11 Novembre

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