Portada del sitio > Movimientos > Migración > "Ahí Dios verá": Migrante hondureño

"Ahí Dios verá": Migrante hondureño

Domingo 6 de febrero de 2011, por Lupe Revueltas, sonrics

Fotos, audio y texto: Sonrics Tavare & Lupe Revueltas
— 

"Inmigrante ilegal condenado a dejar a su tierra y su familia por el hambre y la represion..." [Inmigrante ilegal- Sin Dios]

Valle de Cuautitlan, Edo. de Mexico. Cuando en México se habla de migración aparece inmediatamente en el imaginario social los hermanos, padre u amigos mexicanos que cruzan diariamente la frontera buscando el american dream sin embargo, en la mayoría de ocasiones no solemos tomar en cuenta a los centroamericanos que cruzan el país de sur a norte buscando ese mismo sueño que muchas veces terminara en pesadilla.

Los problemas de los migrantes centroamericanos son vistos por todos pero tratados por pocos: muertes, violaciones y secuestros son algunos de los peligros que se encuentran a su paso por la pesadilla mexicana.

Ellos son conscientes de la enorme cantidad de riesgos que se atreven a tomar y los aceptan. Es ello o atenerse a la opción de una muerte lenta a causa de la pobreza heredada durante varias generaciones, una frustración que pocos soportan y que coacciona a muchos a salir de sus lugares de origen y tratar de sobrevivir en el “viaje de la muerte” para llegar a su destino y lograr su objetivo: brindar bienestar a su familia. Pocos lo lograran.

Autoridades migratorias, policías de los 3 niveles de gobierno, el ejército mexicano, los zetas y los pandilleros de la Mara Salvatrucha, forman un conglomerado criminal, que lucra con la necesidad de miles de migrantes centroamericanos olvidados por la políticas económicas de sus respectivos países. Los abusos denunciados y documentados por organizaciones de derechos humanos, se amontonan en los escritorios de los funcionarios públicos, pero parecen no frenar los ataques constantes que padecen los migrantes en lugares como Tapachula o Nuevo Laredo.

Algunas cifras

Según cifras del Instituto Nacional de Migración 65 mil 505 centroamericanos fueron deportados en el 2010 de los cuales 28 mil 458 eran guatemaltecos y 23 mil 569 hondureños; es decir, miles de migrantes se convierten en blancos potenciales para el secuestro, la extorsión y la trata de blancas que deja millones de pesos en ganancias para el conglomerado antes mencionado; dinero producto de la economía negra que será blanqueado para que sus activos coticen en bolsas de todo el mundo.

El tiempo que toma llegar de su localidad a la frontera con Estados Unidos para un centroamericano es variable, algunos llegan a su destino en 20 días, otros llevan años tratando de cruzar la frontera sur de México.

El camino y la estrategia brindan dos opciones de transporte: autobús o tren. Tomar el autobús es tomar el riesgo de ser detenido en algún reten migratorio que (debido a la supuesta guerra contra la droga) se han intensificado. Por tren algunos deciden ir de Tapachula a Arriaga un trayecto de 230 km sin salir del Estado de Chiapas, para posteriormente llegar a Ixtepec en Oaxaca y de ahí subir al Estado de México, tratando después de llegar a San Luis potosí para finalmente llegar a Nuevo Laredo, un territorio más de los zetas, como Antonio*: “son los zetas los que la vigilan y cobran derecho de paso de la frontera” señala.

Testimonio

w

"Casa del migrante San Juan Diego"

Una opción de descanso para ellos son las casas de migrantes, como la "Casa del migrante San Juan Diego" dependiente de la diócesis de Cuautitlán, que ofrece alojo por 48 horas, comida y atención medica a migrantes que pasan por la zona de lechería en el Estado de México, una de las zonas más peligrosas en la ruta del migrante.

Guadalupe Calzada, coordinadora de la casa comenta que los peligros para los migrantes son infinitos y por parte de las autoridades no existe protección alguna, es por eso que se tomó la decisión de crear ese centro de atención y apoyo a esa vulnerable población.

Ella misma nos relata su experiencia como migrante y lo que la llevó a iniciar este proyecto.

w

Los riesgos

Un peligro que corren, es que al tratar de subir al tren en movimiento tropiecen y el tren los arrolle, quedando sin alguna extremidad. Un migrante entrevistado nos comenta que siempre es mejor tomar el tren detenido para evitar accidentes.

El miedo se hace presente mientras avanzan en su largo viaje, otro peligro dicen, es hacia a las autoridades mexicanas y su abuso de poder. Los migrantes esperan días (ya que llegan rumores de que la policía federal o las patrullas de migración están vigilando el área) para esconderse, correr y burlar a la "autoridad mexicana", para después hacer los mismo con la "autoridad estadounidense", el miedo es fuerte pero la necesidad lo es más, responden con desconfianza a los reporteros.

El frío en ciertas épocas del año es otro problema que se agudiza en la línea vertical que marca su trayecto, solo el calor de la charla entre compañeros de viaje y de desgracia hace un poco soportable las bajas temperaturas de los estados norteños mexicanos, algunos han tratado de cruzar más de 10 veces y no lo han logrado, sin embargo lo seguirán intentando, la palabra regreso está casi prohibida.

Después de la noticia con respecto a los 72 cadáveres de migrantes centroamericanos asesinados en un rancho de San Fernando Tamaulipas en agosto pasado, el flujo de migrantes ha bajado significativamente, señala personal del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia DIF que trabajan como voluntarios en la casa San Juan Diego, cuyo financiamiento es a través de donaciones y ayuda de la sociedad civil.

La migración es respuesta a un sistema económico desigual que escupe seres humanos de sus comunidades, sorteando todo tipo de peligros y abusos por quienes dicen defenderlos, para que después lleguen a trabajar en condiciones de esclavitud en un país que no ofrece ni igualdad ni un trato humano, en un mundo donde solo la libertad real de transitar por él la tiene el dinero, y en donde lo humano es perseguido por los mismos que los orillaron a emigrar.

Apoyo en Lecheria

La directora Guadalupe Calzada sabe que la casa es un proyecto para su desarrollo personal y para hacer algo menos pesado el largo viaje hacia los Estados Unidos.

Si alguien desea apoyar en esta labor, puede donar ropa en buen estado para hombre, comida enlatada, pasta de dientes y cepillos dentales, vendas nuevas, aspirinas y café.

Las amenazas

Trabajar con migrantes no es cosa fácil; así como ellos sufren durante el viaje, quienes trabajan en estas casas de apoyo también sufren amenazas e intimidaciones.

Amnistía Internacional envió durante esta semana una Acción Urgente solicitando más apoyo hacia la "Casa del Migrante San Juan Diego" que aunque desde hace unos meses ya cuenta con medidas cautelares ha sido amenazada de nueva cuenta "de quemar el albergue y atacar a quienes se encuentren en él y a Guadalupe Calzada como un perro"

Si deseas conocer más al respecto de estas amenazas, descarga el adjunto de la Acción Urgente.

Al final del viaje

Agradecemos a Guadalupe Calzada y a los migrantes que se abrieron y aceptaron nuestra entrevista por las facilidades prestadas. Les deseamos que lleguen pronto y con bien a su destino.

— 

*El nombre fue cambiado por motivos de seguridad

Documentos adjuntos

Comentar este artículo